deliciosamente la vista
se me perdía entre verdes
campos y ríos tan ufanos
pero en un santiamén irrumpieron
máquinas con fragor inusitado
y a su paso nubes tóxicas como peste
Oh dignos árboles sus hojas y
cuanto hubo de auténtico
rumbo al holocausto
inevitablemente
el ojo negó aquellas imágenes
cerrándose sin concesiones aunque
los ecos de matanza no cesaran
hasta después de medianoche
Cuánta violencia en torno
qué desastre llevamos a cabo
Me retiro de estos sitios en ruinas
agradeciendo sin dar razones
que haya la muerte como escuela
más una palabra de aliento
para quien resista
a semejante forma brutal
de progreso
ALBIN
imagen= Josephine Wall