se conmueve
frente al concierto humano
cuando por sus laberintos
destellan bosques, montañas, ríos
No acuerda
con abalorios en red
ni acepta las reglas
Su ilusión
es contemplar el agua los pensamientos
discurrir suavemente
Extasiarse de nubes, sus nuevas formas,
imaginando qué reinos
visitarán
.
El poeta
está de paso, como todes,
pero él se da cuenta